Por Praede Olivero Feliz.
OPINIÓN.- Amanda Jiménez Rivas fue
empleada de Moto Préstamo Nacho hasta el 30 de julio del año 2016, el 12
de septiembre mando a comprar una lavadora, conforme al recibo numero 1969 y el
12 de noviembre del mismo año fue apresada y maltratada por Nacho y la policía.
La magistrada Yocasta ordeno su
libertad, pero el Magistrado Corintio se cogio la demanda y junto a Wendy, un
oficial policial, la retuvieron, poniendo en riesgo su salud y su vida, por lo
que fue llevada de emergencia a un centro de salud, haciendo valer allí su decisión,
la Magistrada Yocasta, por lo que obtuvo su libertad, pues no ha cometido ningún
acto delictivo.
Desde entonces, Nacho, Corintio y Ariel,
no la han dejado vivir tranquila, la chantajean y amenazan con
presentarle acusación, junto a otros clientes de los que han abusado, apresándolos, maltratandolos, hasta que los jueces los han puesto en libertad al comprobar
las violaciones de sus derechos.
Ahora, cuando el Magistrado Corintio no
esta en funciones, por estar de vacaciones practica un allanamiento ilegal a la
morada de Amanda y de su madre Ysabel del Carmen Rivas Molina, amenazándolas y presionándola
para que sea testigo contra los demás ex empleados imputados, sin
cometer ningún hecho delictivo, a lo que se ha negado siempre, ya que ha
dicho que las maniobras fraudulentas en el sistema contable digital las hace el
mismo Nacho, su cuñada y su esposa.
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