BARAHONA.- Los barrotes de la cárcel pública de esta
ciudad no han significado un estancamiento para el desarrollo personal de
Amable Suero, el cual está recomponiendo su vida, aferrado al talento y
arte que ejerce en el lugar que encierra su mente pero no su interés para salir
hacia delante.
Amable está recluido en la carecer pública de esta ciudad
donde cumple condena ante “incidente de la vida”, pero trabajando sin descanso
creando hermosas obras de artesanía desde ese lugar.
Le apodan “El Manquito”, pues perdió una mano, pero
esto no es óbice para que pueda desarrollar ese “don” que tiene, creando obras
de arte preciosas en el recinto carcelario en donde cumple condena.
Suero, es además técnico en reparación de efectos del hogar,
tales como abanicos, estufas y lavadoras, entre otros electrodomésticos y
elevadores de energía.
He ahí el ejemplo a imitar a sabiendas de que deberá
estar en la cárcel por unos años, como consecuencia del incidente en el que
estuvo envuelto.
Suero aprovecha el tiempo, y desde allí se recompone,
mostrando al mundo lo que se puede hacer con esfuerzo, dedicación, trabajo y
perseverancia.
Fuente: ElGuazarero.com
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