INTERNACIONAL.- En el último episodio de la trama
alrededor de la histórica cumbre entre Donald Trump y
el Kim Jong-un, el presidente de EEUU dio su voz de victoria.
Trump, sin ocultar su júbilo, dijo ante la prensa que
su reunión con el líder norcoreano Kim Jong Un se llevará a cabo como está
previsto el 12 de junio en Singapur.
Trump hizo las declaraciones fuera de la Casa Blanca
después de una reunión de 80 minutos con un alto funcionario norcoreano, Kim
Yong Chol.
Hace una semana la cumbre parecía estar muerta después de
que el presidente se retiró de la reunión en medio de una retórica creciente de
Corea del Norte sugiriendo que nunca aceptaría la desnuclearización de la
península de Corea.
Funcionarios norcoreanos también insultaron al
vicepresidente Pence y parecieron ofenderse por las referencias de funcionarios
estadounidenses al fin del régimen del dictador libio Moamar Gadafi en Libia.
Gaddafi fue derrocado años después de su propio acuerdo para renunciar a su
programa nuclear.
Pero ese impasse fue seguido por nuevas conversaciones
entre EEUU Y Corea del Norte después de que Pyongyang enfatizara su interés de
seguir con los planes de la histórica cumbre entre los dos países.
Hoy despues del anunció el presidente Trump dijo hoy que
no impondrá más sanciones a Corea del Norte mientras duren las negociaciones
con Pyongyang, y afirmó que espera que llegue el día en el que pueda “levantar”
las sanciones al régimen norcoreano.
“Teníamos cientos de sanciones nuevas preparadas para
implementarse (…), pero dije que no voy a imponerlas hasta que las
conversaciones se detengan”, afirmó Trump en declaraciones a los
periodistas después de reunirse con el número dos del régimen de Pyongyang, Kim
Yong-chol.
Los pronunciamientos del magante se dan tras la visita de
Kim Yong Chol, el representante norcoreano de más alto rango en visitar la Casa
Blanca en 18 años y quien ha estado profundamente involucrado en conversaciones
nucleares durante años.
Con información de EFE