Por Benny Rodríguez.
SANTO DOMINGO.- El Procurador General de la República, Francisco Domínguez Brito, Juramentó la tarde de ayer a Yván Ariel Gómez Rubio como fiscal titular del Distrito Judicial de Barahona, junto a otros 13 de sus colegas.
El acto de juramentación de los titulares del Ministerio Público en diversas demarcaciones del país, tuvo lugar pasadas las tres de la tarde de este martes en el salón de actos de la Procuraduría General de la República de esta Capital.
Se recuerda que conforme a la Ley Orgánica del Ministerio Público 133-11 los fiscales, en el que participaron decenas de aspirantes, deben someterse a un concurso de oposición para obtener la plaza, los cuales deberán permanecer en el puesto por un periodo de 4 años.
Al acto de juramentación de los fiscales de varias partes del país, Gómez Rubio se hizo acompañar de su esposa América Esperanza Ledesma Agramonte.
Confianza
El fiscal titular de Barahona, sustituyó hace algunos años en el puesto a Pedro Mártir Terrero, quien, además, es licenciado en Ciencias de la Comunicación y quien tuvo un excelente desempeño como titular del Ministerio Público en Barahona.
El trabajo que ha venido desarrollando el joven titular del Ministerio Público de la ciudad sureña ha sido reconocido por la sociedad barahonera quienes han depositado su confianza en él, a quien se tiene como una persona que solo actúa movido por la justicia y la aplica sin contemplaciones a los que violentan las normas de convivencia o transgreden la ley.
Gómez Rubio, durante el tiempo que se ha desempeñado como fiscal han enfrentado con firmeza el tráfico, tanto macro como micro del ilegal negocio, muchas veces ignorando el peligro al que se expone tanto él como su familia.
Se recuerda que las seccionales de la provincia de Barahona del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP) y del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), le entregaron al joven fiscal una placa de reconocimiento por su trabajo en beneficio de la sociedad local y regional, así como por sus esfuerzos de enfrentar el tráfico local, regional e internacional del criminal negocio de las drogas.