Reporteros de El Nacional comprobaron que aunque los residentes respaldan la reconstrucción del hotel rechazan lo que denominaron “privatización” de al menos dos playas y el traslado de 40 familias.
En tanto que, aunque el ministro de Medio Ambiente, Francisco Domínguez Brito, dijo que el hotel no viola las normas medioambientales, Rafael Matos Féliz, ex director de la UASD-Barahona, afirmó que en un descenso que realizaron en el lugar comprobaron que viola la distancia de los 60 metros contemplados en la ley 64-00 de Medio Ambiente.
La pared de más de dos metros que levantan obreros de varias compañías, impedirá que los residentes en los alrededores puedan observar las playas. Lo mismo le ocurrirá a los visitantes de esta zona turística que para acceder a estos balnearios tendrán que hacerlo con permiso de los propietarios del hotel.
Dijo que si es necesario cambiar la pared por una verja metálica, se haría para que la gente pueda ver la playa desde la calle.
En tanto que equipos pesados de varias compañías contratistas laboran a ritmo acelerado tanto en el interior del complejo como en la construcción de la pared. Los trabajos son dirigidos por Alex Castillo, hijo del ministro de Obras Públicas.
Gonzalo lo compró al Estado
El ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo, admitió que es propietario del hotel y que lo compró al Estado a través del Banco de Reservas en 91 millones de pesos. Ayer el funcionario dijo en tono desafiante que no teme a nada, que El Nacional publique lo que quiera.
Alcaldía desconoce
El alcalde del municipio La Ciénaga, Kelvin Féliz, informó que ni a él ni los regidores se les ha informado de la construcción.
Explicó que no se oponen a la construcción, pero que la ley 176-07 establece que tiene que tener permiso del cabildo de la zona.
“Nosotros no nos oponemos a la obra, pero creemos que los dueños del hotel han debido acercarse a la Alcaldía para obtener los permisos correspondientes”, declaró Féliz.
Reporteros de El Nacional conversaron ayer con familias del distrito municipal Baoruco y de La Ciénaga, quienes reaccionaron de diversas maneras. Unos se alegraron porque la obra genera empleos para los residentes y otros expresaron su temor de ser desalojados de los alrededores de la playa.
La joven Angélica Franky, residente en las proximidades de la playa de Baoruco, dijo que mediante rumores se enteró que los trasladarían a los terrenos ubicados al lado del cementerio, “pero no hay nada concreto con eso que se dice”, añadió.
La señora Lucila Méndez declaró que “yo vivo aquí toda mi vida, pero no creo mucho eso de que nos van a trasladar, cuando lo vea lo voy a creer”.
Al lado del cementerio de esta comunidad fueron observado equipos pesados que laboran en la obra, preparando una explanada donde alegadamente serían construidas viviendas para las familias que viven en las proximidades del hotel.
Esta versión había sido corroborada por Matos Féliz, quien dijo que los residentes de la zona le informaron que toda la costa sería intervenida y que dichas operaciones contemplaban el traslado de las familias a la cercanía del camposanto.
Obras Públicas
En las proximidades de la obra fueron observadas varias brigadas del Ministerio de Obras Públicas que realizaban labores de limpieza.
En las proximidades de la obra fueron observadas varias brigadas del Ministerio de Obras Públicas que realizaban labores de limpieza.
Tomado de: elnacional.com.do
Facebook
