Por: Manuel Ocaño.
INTERNACIONAL.- Un pedazo original del Muro de Berlín,
que unos ciudadanos alemanes enviaron a la Casa Blanca -lugar donde fue
rechazado- ahora “necesita de un hogar que esperamos encontrar entre Tijuana y
Los Ángeles”, dijo a La Opinión Sergio Alcocer, uno de los encargados
de transportar la pieza.
“Necesitamos un lugar donde lo pueda ver el público
porque es una pieza histórica. Nos gustaría que fuera Tijuana [México] por la
historia que tiene con los muros, pero también hemos pensado que podría ser en
Los Ángeles por la cantidad de personas que lo podrían apreciar“, indicó el
empresario de Texas.
El bloque de piedra fue entregado el pasado 9 de
noviembre en la Casa Blanca, a la misma hora en que hace 30 años se empezó a
derrumbar el muro, colocado en Berlín en 1961 y que separó a Alemania en dos
hasta 1989. El objetivo, indican, era conmemorar el evento histórico de la
caída de esta división con el presidente Donald Trump.
Esculpida con cincel, a lo largo del muro se plasmó una
carta dirigida al mandatario estadounidense. La misiva indica que “durante
décadas, Estados Unidos jugó un papel relevante para derribar este muro. De
John F. Kennedy a Ronald Reagan, presidentes de EEUU lucharon [por
ello]”.
“Nos gustaría entregarle una de las últimas piezas del
muro fallido de Berlín para conmemorar la dedicación de los Estados Unidos en
construir un mundo sin muros”, indica el mensaje tallado que fue escrito por
una agrupación civil alemana a nombre de la Fundación del Muro de Berlín.
Cuando la carta-muro no logró cruzar la Casa Blanca, “la
pieza fue llevada en un recorrido con paradas en sitios históricos en la
capital [de EEUU], donde la gente aprovechó para tomarse fotos y selfies”,
platicó Marcos Cline Márquez, otro de los encargados de trasladar la pieza y
quien señala en redes sociales que “los muros no funcionan” bajo el hashtag
#thewallagainstwalls (El muro contra los muros).
Posteriormente la organización que la trajo desde
Alemania decidió que el tramo de muro recorriera otros miles de millas hasta la
frontera de San Diego con Tijuana, donde hace 25 años se levantó el primer
muro fronterizo.
Cline Márquez y Alcocer, de la empresa Rest of the World
(de Austin), ahora tienen el encargo de encontrar un hogar para esta histórica
pieza.
“No solo es histórica, sino conmemorativa. Estados Unidos
fue fundamental para la caída del Muro de Berlín”, explicó Alcocer.
La pieza, de unos 12 pies de alto y 2.7 toneladas de peso,
no podrá permanecer en despoblado en esa zona de la frontera de California, ya
que carecen de permiso para instalarla en terrenos federales.
La presentación a la prensa no tuvo limitaciones por
parte de la Patrulla Fronteriza. No obstante, de acuerdo con Alcocer, dicha
zona en San Ysidro tampoco es ideal para instalarla ya que es un área remota donde
rara vez llegan visitantes. Agregaron que es casi imposible verla desde el lado
mexicano de la frontera, que tiene una doble barda fronteriza intermedia y una
autopista de alta velocidad.
“Nuestra misión ahora es llevarla a un lugar ideal, que
sería entre Tijuana y Los Ángeles”, dijo Alcocer.