SANTIAGO.- El
cabo de la Policía Nacional, Juan Ramón Pascual Ramírez, fue arrestado tras
agredir a tres comunicadores durante la cobertura de un incendio en la plaza
turística Mercado Modelo, ubicada en la intersección de las calles Del Sol y
España.
El
incidente, que tuvo lugar ayer, ha provocado una fuerte reacción por parte de
los gremios periodísticos de la ciudad, quienes exigen sanciones
correspondientes al agente involucrado.
El Sindicato
Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) y el Colegio Dominicano de
Periodistas (CDP) expresaron su enérgica condena al comportamiento del cabo.
Juan Carlos
Bisonó, secretario general del CDP, y José Batista, representante del SNTP,
anunciaron que presentarán una querella formal contra Pascual Ramírez,
subrayando la gravedad de los hechos ocurridos.
El altercado se inició cuando el camarógrafo Roberto Reyes, que trabaja para los programas dirigidos por el comunicador José Gutiérrez, fue agredido por el agente, resultando en una caída al pavimento.
Las periodistas Maricela de la Cruz y Amparo Infante intervinieron en defensa de Reyes, pero también fueron agredidas por el cabo, quien las manoteó de manera violenta.
La situación fue contenida gracias a la intervención del coronel Alexis Moscat, intendente del Cuerpo de Bomberos, y de Francisco Arias, director de la Defensa Civil, quienes evitaron que el incidente escalara a mayores consecuencias.
En una declaración pública, José Gutiérrez enfatizó la necesidad de imponer sanciones disciplinarias estrictas al agente para asegurar que este tipo de comportamientos no queden impunes.
Por su parte, el mayor general Ramón Antonio Guzmán Peralta, director general de la Policía Nacional, condenó los actos del cabo, afirmando que estos se apartan completamente de los lineamientos de la institución.
Guzmán Peralta aseguró que la Inspectoría General de la Policía ya ha iniciado un proceso disciplinario contra Pascual Ramírez.
Para garantizar la seguridad en la zona del siniestro y evitar actos delictivos, el Comando Regional Cibao Central de la Policía ha desplegado varias unidades en el área afectada.
Este despliegue busca proteger tanto a los comerciantes como a los ciudadanos mientras se recuperan de los daños.