SANTO DOMINGO.- La Facultad de Ciencias Económicas y
Sociales de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, la Fundación Juan Bosch y
la Coalición por una Seguridad Social Digna, presentaron a la opinión pública
nacional los hallazgos del estudio Radiografía de las AFP y ARS: análisis
económico para el debate de políticas públicas, el cual fue elaborado por los
investigadores Matías Bosch Carcuro y Francisco Tavárez Vásquez.
Según Matías Bosch y Francisco Tavárez, la reforma de la Ley
13-20 solo sirvió para blindar los ingresos de dichas empresas, sobre todo las
ganancias de las AFP, las que están desprovistas de los riesgos del mercado y
solo tienden a crecer, superando los 5,000 millones de pesos en 2023, lo que,
de continuar la tendencia del primer semestre de 2024, al final de año estarán
cerca de los 5,500 millones y más en el presente año.
Otros hallazgos del estudio se refieren a que más del 80 %
del negocio está en manos de cuatro AFP, y más del 70 % en tres AFP privadas:
Popular, Crecer y Siembra. Las AFP, gracias al esfuerzo de la clase trabajadora
y empleadores, tienen invertido el equivalente a más de 3 veces el déficit
fiscal del país, superando el 10 % del PIB.
Según el estudio en cuestión, las ARS privadas incrementan
sus ingresos y ganancias, logrando en 2023 más de RD$53 mil millones en
ingresos y casi RD$4,000 millones de pesos en ganancias, concentrando casi el
90 % de este negocio, siendo las principales PRIME, MAPFRE y UNIVERSAL,
mientras que las dos primeras responden a inversores extranjeros.
Asimismo, en el estudio se resalta que las ARS privadas han
absorbido casi RD$75 mil millones de pesos en ganancias y gastos de
administración. En este sentido, si se sumase lo absorbido por AFP y ARS, el
monto supera los RD$175 mil millones de pesos que esta intermediación
financiera cuesta a la sociedad dominicana, sin ningún bien, ni servicio, ni
valor que sirva a la población.
Además, en los datos del estudio se aprecia la instauración
de un régimen donde el acceso universal a la atención en salud es convertido en
mercancía que se subordina a la capacidad de pago, a la rentabilidad esperada
de las entidades intermediarias y al lucro financiero.
Las personas y sus derechos son el riesgo, mientras las ARS,
al igual que las AFP, no cumplen ningún criterio de optimización de recursos,
satisfacción de expectativas, ni eficiencia social que pudiera esperarse de
cualquier empresa pequeña o grande, lo cual constituye un fabuloso mecanismo de
transferir recursos públicos a privados.
Matías Bosch y Francisco Tavárez resaltan que: “no es
seguridad social aquello que se cimente en el negocio y la exclusión, pues la
seguridad social verdadera se estructura en el principio de la solidaridad que
permite la protección social ante sucesos previsibles e imprevisibles
(enfermedad, vejez, accidente laboral, entre otros) a los miembros de la
sociedad. Esto no ocurre así en el país, donde millones de dominicanos tienen
la funesta experiencia de una seguridad social vigente, caracterizada por
abusos, recortes y el encuadramiento, en un catálogo de prestaciones y fórmulas
que son funcionales a la rentabilidad, como indicador que determina la
provisión o negación de servicios”.
El estudio Radiografía de las AFP y ARS reconfirma que el
negocio de las AFP consiste fundamentalmente en: prestarle dinero al Gobierno
Central y respaldar con certificados el déficit del Banco Central, en una suma
que ronda los 700 mil millones de pesos; prestarles a los propios bancos
asociados de los grupos propietarios y otros; poner dinero en fondos de
inversión, fideicomisos y empresas privadas.
La conferencia de prensa, en la que se prestaron los hallazgos del estudio Radiografía de las AFP y ARS: análisis económico para el debate de políticas públicas, fue convocada por diferentes instituciones, tales como: Coalición Seguridad Social Digna, Ciudad Alternativa, Escuela Multitemática, Asociación Latinoamericana de Medicina Social (ALAMES), Fundación Frederich Ebert (FES), Facultad de Ciencias Económica y Sociales de la (UASD), Fundación Juan Bosch, Movimiento por las Pensiones de los Servidores Públicos (MOPESEP), entre otras.