Por Modesto Peña Cuello.
OPINIÓN.- Es poco común en las lides de los comercios e industrias de nuestra ciudad, mejorar el embellecimiento alrededor de la empresa o el establecimiento comercial.- Esa práctica no es dable en los propietarios o comerciantes de la zona, por la falta de interés porque entienden que es el gobierno central o los gobiernos locales que deben hacer las obras de infraestructuras.
La obra de embellecimiento encachada en muro de gaviones que realiza y dirige el comerciante Novas Duncan, donde desemboca el rio Biran, no es producto del infortunio ni tampoco casual, eso, él, lo heredo de su padre Baldemiro-Solito- Novas, dirigente revolucionario, sindical, luchador de las libertades, democracia y las conquistas estudiantiles.
Con ese gesto de humanidad y tocado por Dios, en la cual Novas Duncan ha eliminado un foco de contaminación que siempre fue un atentado a la salud no solo de los clientes que frecuentaban ahí, sino también del barrio La Playa y de Barahona.
Queremos expresar nuestra más sincera felicitación al destacado comerciante Greibal por tan atinada idea y puesta en práctica, con el propósito de darle un aspecto más turístico, urbanístico, higiénico, humanístico y agradable a la vista de los que visiten ese hermoso lugar donde cruza el rio Biran que nos identifica como Barahoneros.
Esa obra de embellecimiento que hace el ciudadano Greibal, debe servir de ejemplo e inspiración a los demás sectores de esta comunidad, con el propósito de que hagan sus contribuciones al desarrollo de este histórico municipio a través del presupuesto social participativo consignado en la Ley 176-07
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